Pérdida auditiva: un factor común en personas mayores

Con la edad, las personas inician un proceso paulatino de pérdida de audición que se hace evidente al iniciar el tránsito por los sesenta años. La sociedad de Geriatría y Gerontología de Chile, estima que un 30 por ciento de los adultos mayores presentan trastornos auditivos y esto puede llegar al 50 por ciento al arribar a los 80.

La pérdida de la capacidad auditiva influye en las actividades diarias de las personas, produce aislamiento social, problemas de comunicación y cambios de humor en las personas. Esta condición, también afecta la independencia de los ancianos debido a la dificultad de escuchar sirenas, timbres y de utilizar el teléfono, a todo esto, se suma el riesgo de sufrir caídas.

¿Qué causa la pérdida auditiva en la tercera edad?

La edad avanzada no es el único factor responsable de la sordera, la exposición prolongada a ambientes ruidosos, infecciones de oído mal curadas, factores hereditarios, enfermedades crónicas (Diabetes o hipertensión arterial) y la mala alimentación; son elementos que también están asociados a la pérdida auditiva.

¿Existen tratamientos?

Ante los altos índices de pérdida de audición que existen en esta población, los especialistas recomiendan acudir a consultas preventivas con un otorrinolaringólogo el cual realizará las evaluaciones pertinentes a fin de determinar el grado de pérdida que posee cada persona.

La indicación más común ante esta problemática es la utilización de audífonos, cuya potencia será de acuerdo al grado pérdida auditiva del paciente.

¿Cómo pueden ayudar amigos y familiares?

La pérdida auditiva causa problemas en la comunicación de quienes la padecen, por ello, las personas de su entorno pueden contribuir conversando con ellos frente a frente, en un tono de voz alto y claro (sin gritos), modular las palabras (sin exagerar los sonidos), hacer pausas al concluir las frases y evitar los ruidos de fondo.